Hace tan sólo unas semanas visité este pueblecito francés situado entre los Pirineos y la frontera española. No tendría nada de particular de no ser porque en este lugar, es dónde en 1858 se apareció la santísima Virgen María a Bernadette Soubirou. En aquel momento, muy pocos podrían imaginar que este pueblecito francés se haría famoso por albergar el principal Santuario Mariano de Europa.
Para haceros un poco a la idea de la historia de este lugar, en 1858 tuvieron lugar una serie de apariciones de la virgen María a Bernadette. Pronto, la noticia corrió como la pólvora y comenzaron a sucederse los primeros milagros debido al agua del manantial que la Virgen hizo que encontrara Bernadette. Es inevitable conocer esto, puesto que la vida de Lourdes está íntimamente ligada con este hecho. Vamos, que no puedes ir a Lourdes y no ver la Gruta donde se apareció la virgen (que es algo así como ir a París y no ver la Torre Eiffel)